Juan de Valdés y Bartolomé Carranza. Sus normas para leer la Sagrada Escritura

Abstract

En un artículo anterior he estudiado detenidamente los incidentes de un escrito de inspiración valdesiana, cuya difusión se atribuyó a Bartolomé Carranza. Tras analizar con toda minuciosidad las declaraciones de los testigos y del inculpado arzobispo, llegué a las conclusiones siguientes: Carranza, que vio esporádicamente a Juan de Valdés por dos veces en sus años juveniles, no fue íntimo amigo suyo, como repiten los historiadores; no le llegó a ver en Italia en 1539 al tiempo de obtener su grado de maestro en Teología, ni leyó nunca las Consideraciones del espiritual de Nápoles. Sin embargo, al sustentar en Roma tesis antiprotestantes acerca de la lectura de la Sagrada Escritura, recibió de un amigo de Valdés una hoja en 4.°, con página y media de escritura, en la que, sin él saberlo, se hallaba el texto de una de las Consideraciones de Valdés, en la que se trataba de la oración y consideración como intérpretes de la palabra de Dios. (Consideración 54 de la actual edición).