La unión en la diversidad en los proyectos de formación espiritual del presbítero diocesano

Abstract

Teóricamente, nadie pone en duda que la unidad y la diversidad constituyen dos elementos esenciales de la comunión eclesial. En el terreno práctico, por el contrario, a veces se da la impresión de que el uso de la palabra communio obedece más a una moda eclesiológica que a una comprensión clara de su verdadero significado. La formación espiritual, tanto inicial como permanente, del presbítero diocesano, es una muestra, entre otras, de una tendencia al uniformismo, contrario a la comunión. Ello obedece, tal vez, a que no se tiene en cuenta que el sacerdote diocesano, además de los ámbitos de sumisión y obediencia que le corresponden en su condición de clérigo, posee también ámbitos de libertad derivados de la condición de fiel que no ha perdido por el hecho de haber recibido el sacramento del orden.