Semblanza biográfica del Beato Manuel González García

Abstract

Muchas y muy variadas facetas tiene la vida del beato Manuel González, pero hay una idea amada y perseguida con toda la vehemencia de su alma, con todo el calor de su corazón, con todas las energías de su ser, y esta idea que se confunde con su vida, o con su mismo vivir, es la que da una maravillosa unidad a toda ella. Los rasgos de su vida nos dicen que fue un sacerdote ejemplarísimo, párroco modelo de celo pastoral, padre de los pobres, educador de niños, escritor, propagandista, psicólogo, formador del clero, eximio director de almas, y muchas otras cosas que le honran, pero la fuerza motriz de su vida interior y de sus obras ha sido lo que pudiéramos llamar su vocación especial: ser el hombre, el sacerdote, el obispo del Corazón Eucarístico de Jesús, del Sagrario abandonado. Éste es el centro a donde convergen sus pensamientos, sus palabras y las obras de toda su vida, y que aún se perpetúa después de su muerte. La misma lámpara que alumbra el Sagrario de la catedral palentina, alumbra la losa desde donde sigue gritando el apóstol del Sagrario: ¡Ahí está Jesús!